Compartir en redes sociales

NIño con mascota

Salud

6 Jul 2020

Y educir su comportamiento antisocial

Los perros pueden mejorar el desarrollo socioemocional de los niños

Redacción / Madrid

Los niños pequeños que pertenecen a hogares con perros tienen un mejor bienestar social y emocional que los de familias que no tienen compañía canina, según un estudio realizado por investigadores de la Universidad de Australia Occidental y el Instituto Telethon Kids, afiliado a ese centro universitario.

El estudio, publicado este lunes en la revista 'Pediatric Research', se basa en cuestionarios realizados a 1.646 hogares con niños de dos a cinco años, de los que 686 tenían perro (un 42% del total).

Tras analizar la edad, el sexo, los hábitos de sueño, el tiempo frente a pantallas y el nivel de educación de los padres, los investigadores concluyen que los niños de familias con perros tienen un 23% menos probabilidades de contar con dificultades generales con sus emociones e interacciones sociales que aquellos que no conviven con este tipo de mascota.

Además, la presencia de un perro en la familia reduce un 30% las probabilidades de que los niños desarrollen comportamientos antisociales y un 40% las de tener problemas para interactuar con otros menores, y aumenta un 34% las de tener comportamientos considerados socialmente.

"Si bien esperábamos que la propiedad del perro proporcionaría algunos beneficios para el bienestar de los niños pequeños, nos sorprendió que la mera presencia de un perro de la familia se asociara con muchos comportamientos y emociones positivas", apunta Hayley Christian, uno de los autores del estudio.

Entre los niños de hogares con perro, los que se unen a sus familiares en pasear a la mascota al menos una vez a la semana tienen un 36% menos de probabilidades de tener un desarrollo social y emocional deficiente que los que caminan con su perro menos de una vez por semana.

Los niños que juegan con su perro tres o más veces a la semana tienen un 74% más de probabilidades de participar regularmente en comportamientos considerados que los que lo hacían semanalmente menos de tres veces.

"Nuestros hallazgos indican que la propiedad del perro puede beneficiar el desarrollo y el bienestar de los niños, y especulamos que esto podría atribuirse al vínculo entre los niños y sus perros. Los vínculos más fuertes entre los niños y sus mascotas pueden reflejarse en la cantidad de tiempo dedicado a jugar y caminar juntos y esto puede promover el desarrollo social y emocional", añade Christian.

Etiquetas