- “La lectura puede convertirse en algo útil porque primero hemos amado su bella inutilidad”
‘El infinito en un junco’ (Siruela) es un intenso y apasionado viaje por la cartografía del libro, el libro como objeto, como símbolo, como sima abisal que despierta conciencias, traspasa épocas, construye futuro y resignifica pasados.
- “Habría que ver si la imperfección no genera más interés, más intriga y más relecturas estéticas”
Hay un regusto de maestría, de lecturas incorporadas, de homenajes en suspenso, de lugares de espera habitados en lo que escribe, sea poesía, novela, ensayo o relato.
- “Antes había más respeto, más dudas, más vergüenza al decir que eras poeta”
Jam sessión. Encuentro informal en el que preside la improvisación. Se aplicaba, en origen, a los encuentros de músicos de jazz, tan proclives a lo espontáneo, a la contingencia. Poco a poco, este concepto ha ido calificando distintas disciplinas. Por ejemplo, la poética.
- “Habrá que pelear por conseguir que el mundo incorpore pulsiones hedonistas”
‘Anarquistas y libertarios de aquí y ahora’ (Catarata).
- 'Pedir la Luna' o una reflexión polifónica sobre el arte de traducir
Uno de cada cuatro libros que se publicaron en España en la primera década del segundo milenio fue traducido. La voz que escuchamos –aunque parezca una perogrullada, no lo es- no es la del autor, sino la del traductor. Nada fertiliza más una lengua que la tarea de los traductores.
- “Vivimos en una burbuja de presunta felicidad que enmascara una realidad espantosa de precariedad, muertes y destrucción de la biosfera”
A sus 97 años, Raffaele La Capria (Nápoles, 1922) continúa siendo una figura respetada, se esté o no de acuerdo con él. Lúcido, comprometido, contundente, usa la inteligencia tanto como el humor y lo instintivo.
- En lo cotidiano reside el corazón simbólico de las cosas
Sus dibujos muestran mujeres con ojos grandes, como las de Mastretta pero hechas de la intensidad de las escamas de los peces, profundos sin parecerlo, hondos como el infinito que llevan los caracoles a cuestas, bellos como un sí que se espera desde hace tiempo. Hipnóticos. Llevan timbre de lugares que uno reconoce.
- “Para d’Ors, Jesús es un anarquista; otra cosa es la Iglesia Católica, cuyos valores abanderó durante toda su vida”
Javier Varela (Madrid, 1952), Doctor en Ciencias Políticas y Sociología, es profesor de Historia del Pensamiento Político en la UNED. Ocupó la dirección de los centros de la UNED en Guinea Ecuatorial, del Museu Valenciá de la Ilustració y la Modernitat, y es autor de numerosos libros, sobre Jovellanos, Pedro Salinas, Blasco Ibáñez, Azorín.
- “La sed es una cualidad de los vivos”
Abril en los inviernos (Chamán ediciones) resulta el fruto de un compás de soledad y espera, encanijado de alharacas, ascético en sus formas, desnudo, silente, contenido.
- “Somos las palabras que habitan en nosotros”
En la orilla de las cosas (Vaso Roto). Con este poemario, la mejicana Gabriela Riveros (Monterrey, 1973) se detiene en el borde para zurcir, con mirada oblicua, sinuosa, justa –en la medida que se puede serlo- un pasado ya fijado en piedra, inamovible.