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Las aves insectívoras, como el alzacola rojizo, incluyen de media más especies en riesgo de extinción que ningún otro grupo de pájaros | Foto: Hugo Sánchez

Biodiversidad

3 Mar 2022

SEO/BirdLife reivindica los servicios ecosistémicos que ofrecen las aves

Una de cada cuatro especies está amenazada de extinción, según la ONU

Redacción / Madrid

Naciones Unidas celebra este jueves el Día Mundial de la Vida Silvestre bajo el lema 'Recuperar a las especies clave para la restauración de ecosistemas' con el fin de crear conciencia sobre el estado de las especies amenazadas de extinción -algo que afecta a una de cada cuatro- y resaltar los esfuerzos de conservación.

"¿Por qué nos preocupamos por la vida silvestre? Más allá de tener el deber moral de conservar la Tierra, la humanidad depende de los productos y servicios esenciales que proporciona la naturaleza, desde los alimentos y el agua dulce hasta la lucha contra la contaminación y el almacenamiento de carbono. Cuando dañamos el mundo natural ponemos en peligro nuestro propio bienestar", apunta el secretario general de la ONU, António Guterres, en un mensaje con motivo del Día Mundial de la Vida Silvestre.

Guterres señala en su mensaje, recogido por Servimedia, que "en la actualidad la vida silvestre está amenazada en todo el mundo". "La cuarta parte de las especies están en peligro de extinción, en gran medida porque hemos destruido casi la mitad de los ecosistemas que habitan. Debemos actuar inmediatamente para invertir esta tendencia", apunta.

Subraya que "los ecosistemas son saludables únicamente cuando prosperan las especies que los componen: con que una de las especies clave desaparezca, el ecosistema al completo puede comenzar a decaer y morir". "Por ello, las iniciativas de protección de especies concretas deben ir de la mano de otras encaminadas a restaurar ecosistemas enteros", añade.

'LAS TRES MOSQUITERAS'

Por otro lado, Ecologistas en Acción ha lanzado la campaña 'Las Tres Mosquiteras' con motivo del Día Mundial de la Vida Silvestre, con el fin de concienciare a la sociedad de hacer un mayor esfuerzo por conservar las aves migratorias urbanas, con el foco en tres especies de insectívoros con mayor presencia en ciudades y pueblos: el vencejo común, la golondrina común y el avión común.

Estas especies llegan cada primavera a territorio español para reproducirse y nidificar. Con la llegada del otoño parten hacia África, donde pasan el invierno. Su dieta, basada en la ingesta de insectos, hace de estas especies agentes fundamentales para el control de plagas, que afectan tanto a cultivos como a nuestra salud.

Sin embargo, la eliminación de zonas de crías o la destrucción de nidos, entre otras amenazas, provocan un grave descenso en las poblaciones de estas aves. En el caso del vencejo común, se ha observado un declive cercano a un 30%, según Ecologistas en Acción. Esta especie, así como el avión común, está incluida en el Listado de Especies Silvestres en Régimen de Protección Especial, lo que implica una protección estatal que incluye a sus pollos, nidos y huevos.

IMPACTOS SOCIALES

Por su parte, SEO/BirdLife pone en valor los beneficios que aportan las aves y llama la atención sobre las consecuencias que puede haber por el declive de algunas de sus poblaciones.

"En el caso de las aves, por sí mismas son una parte importante de nuestro patrimonio natural y constituyen elementos fundamentales en el mantenimiento de todos los ecosistemas donde viven. Pero, además, las aves proporcionan a la sociedad un conjunto de beneficios conocidos como 'servicios ecosistémicos' entre los que pueden encontrarse la dispersión de semillas, el control biológico de plagas o el disfrute recreativo”, recalca Nicolás López, responsable del programa de Conservación de especies amenazadas de SEO/BirdLife.

Esta ONG advierte de que el declive de muchas poblaciones de aves o el riesgo de extinción al que se enfrentan algunas especies podría acarrear graves consecuencias ecológicas, sociales y económicas fruto de esa pérdida de biodiversidad. Concretamente, las consecuencias ecológicas de la disminución de las poblaciones de aves podrían tener impactos sociales derivados de la extinción de plantas, de la falta de control de plagas agrícolas o de la propagación de enfermedades, entre otras.

En el último medio siglo, se han extinguido un 1,3% de las especies de aves. Aunque no parece un número muy elevado, lo preocupante, según SEO/BirdLife, es que se cree que durante ese mismo periodo las poblaciones de aves han experimentado en el mundo una reducción de entre un 20% y un 25% de sus poblaciones, lo que implica la desaparición en poco tiempo de millones de individuos por todo el planeta. "Esto supone, entre otras cosas, que las poblaciones de aves y los servicios ecosistémicos que proporcionan están disminuyendo a un ritmo mucho mayor que el de la propia extinción de las especies", agrega.