En caso de confirmarse este avance a mediados de junio, la inflación volvería a repuntar en tasa anual tras el descenso que se experimentó en abril, desde el 9,8% de marzo al 8,3%.

El INE explica que alza de mayo se debió principalmente a los precios de los carburantes y los alimentos y bebidas no alcohólicas, que subieron este mes más que en mayo de 2021.

En sentido contrario, influyó la disminución de los precios de la electricidad, frente a la subida del año pasado.

En mayo, los precios de consumo registraron una tasa mensual del 0,8% respecto al mes de abril, mientras que la inflación subyacente anual (índice general sin alimentos no elaborados ni productos energéticos) aumentó cinco décimas, hasta el 4,9%, la más alta desde octubre de 1995.

En el mes de mayo la tasa de variación anual estimada del IPCA se sitúa en el 8,5%, dos décimas superior a la registrada el mes anterior. Por su parte, la variación mensual estimada del IPCA es del 0,7%.