Compartir en redes sociales

Eire

Entrevista

9 Jul 2020

Eire, ilustradora y escritora

“Para comprendernos podemos primero aceptar a los gatos, y luego trasladar esta nueva mirada a nuestros congéneres y a nosotros mismos”

Esther Peñas / Madrid

Gatos repudiados (Alianza editorial). Con este título, Eire, en realidad Irlanda Tambascio (Venezuela, 1977), reincide en el asunto gatuno. En esta ocasión, reuniendo una vademécum de mininos difíciles, antisociales, despreciados por su carácter, su aspecto, su origen. Eire propone para cada uno de ellos un remedio (botiquín) y un dispensario (hábitat).

De nuevo, gatos. Desde tu último libro, que también los tenía como protagonistas, ¿has aprendido algo nuevo de ellos?

Los gatos son seres asombrosos. Sigo a muchísimos grupos de gatos en redes sociales y no hay día que no me sorprendan sus actitudes. Se llevan bien con muchos animales y su agilidad no conoce fronteras.

De estos 21 estilos de gatos que despiertan no simpatía sino rechazo, el más extraño, según tu criterio, es el esquizoide. ¿Qué realidades desconocidas por los humanos pueden ver estos mininos?

Me gustaría pensar que después de leer el libro sí despiertan simpatía. Ahí está el quid de la cuestión.
Sobre el gato esquizoide: siempre se ha dicho que los gatos ven otras dimensiones, y no sería de extrañar. Cuando los gatos parecen mirar algo que nosotros no captamos, pensamos que están locos. O cuando empiezan a correr por toda la casa por la noche. No sabemos por qué lo hacen, pero probablemente capten energías y realidades más sutiles que nosotros ignoramos. Hay que darse cuenta de que ellos no pierden el tiempo rumiando pensamientos absurdos en sus cabezas como lo hacemos nosotros, así que están más receptivos al entorno.

Tienen cura estos gatos, tú recoges un botiquín para cada uno de ellos pero, ¿cómo buscarles un dueño adecuado?

Muchos de ellos tienen cura: ser acogidos, sanados, amados o aceptados por humanos compasivos. Otros no necesitan cura y quienes sí la necesitan son sus dueños o los propios humanos llenos de prejuicios y neurosis.

Las personalidades de estos gatos se parecen demasiado a las humanas…

Bueno, es que no somos tan distintos.  Somos seres vivos, somos mamíferos y como tales tenemos muchas cosas en común. Todos nos hemos sentido rechazados, todos enfermamos o nos estresamos, todos nos podemos sentir malvados en alguna ocasión... Justamente era el paralelismo que buscaba. Para comprendernos y aceptarnos, podemos primero aceptar a estos mininos y luego trasladar esta nueva mirada a nuestros congéneres y a nosotros mismos, puesto que padecemos los mismos males.

Para atravesar una pandemia, ¿cuál de estos gatos es más aconsejable y cuál de ellos imposible de sobrellevar?

Sería bonito e ideal poder adoptar un gato en plena pandemia, pero a condición de no devolverlo una vez que haya terminado. Yo pasé el confinamiento sola con mi gato y es increíble la compañía que me hizo. Lo que es claro es que ellos estarán encantados de que estemos más en casa haciéndoles caso, pero eso siempre y cuando seamos más o menos cabales y nos sepamos comportar, porque si no, sufrirán más por tener que aguantarnos 24 horas. 

Los gatos callejeros, ¿qué cualidades tienen que los hacen más recomendables que los domésticos?

No sé si son más recomendables. Los gatos callejeros han vivido una vida muy dura y a veces vienen con traumas. También debe ser bonito aprender a vivir con un gato de la calle, que obviamente, viene mucho más salvaje.

Si el gato negro es el que más recelo provoca, ¿cuál es la raza de gato que más gusta a los humano?

Es increíble que a estas alturas se mantenga la superstición hacia el gato negro. Como el ser humano tiende a crear etiquetas, existe una tendencia a preferir gatos de raza o pedigree, como los siameses, angoras, persas… como si tuvieran más categoría cuando en realidad son gatos como cualquier otro. Pero como sobre gustos no hay nada escrito, hay quienes prefieren precisamente gatos del montón, o gatos extraños como los que no tienen pelo. También hay a quienes le gustan mucho los gatos que necesitan de ciertos cuidados porque despiertan su lado más compasivo.  Menos mal que hay todo tipo de gatos y todo tipo de personas.

De esta casuística que recoges en el libro, ¿cuáles son las categorías más propicias para ellos y para ellas?

La verdad es que no creo que haya gatos más aptos para hombres o para mujeres. Hay que verlo caso por caso.

Hablando del gato perro, de un tiempo a esta parte he visto a algunos (humanos) paseando gatos por la calle como si se tratase de perros… ¿qué le parece esta ‘moda’?

¿En serio? Me parece increíble. Probablemente sea el mejor momento para pasear a un gato, justo cuando las calles están vacías, así que si el gato ha sido educado para poder salir a la calle, ¿por qué no? Pero siempre haciéndolo con cabeza y pensando primero en ellos y no que responda solo a un capricho del humano en cuestión.