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Niños de país subdesarrollado

Desigualdades

14 Jun 2021

Caen un 30% las ventas de aparatos eléctricos y electrónicos en naciones de ingresos bajos y medios de enero a septiembre de 2020

La pandemia estira la brecha digital entre países ricos y pobres, según la ONU

Redacción / Madrid

La crisis sanitaria del coronavirus ha intensificado la brecha digital entre países ricos y en desarrollo o pobres, puesto que las ventas de productos electrónicos y eléctricos bajaron un 5% en el primer grupo de naciones entre enero y septiembre de 2020, y el descenso se agudizó al 30% en el segundo. Así se recoge en un informe elaborado por el Programa de Ciclos Sostenibles (Scycle) de la Universidad de las Naciones Unidas y el Instituto de las Naciones Unidas para Formación Profesional e Investigaciones (Unitar), ambos con sede en Bonn (Alemania).

En los tres primeros trimestres de 2020 bajaron entre un 6% y un 8% las ventas de aparatos eléctricos pesados -como refrigeradores, lavadoras y hornos- en todo el mundo, mientras que equipos pequeños de telecomunicaciones lo hicieron sólo un 1,4%. Dentro de esta última categoría, las de ordenadores portátiles, teléfonos móviles y juegos electrónicos de azar aumentaron en los países ricos y disminuyeron en los de ingresos bajos y medianos.

El informe predice una caída futura total de 4,9 millones de toneladas de residuos electrónicos relacionados con las ventas de 2020, aproximadamente un 6,4% menos que en un escenario habitual.

Esta proyección difiere de las expectativas iniciales porque el teletrabajo, la educación en casa, las compras en línea y el visionado de películas y otras actividades domésticas impulsadas por los confinamientos por la Covid-19 hicieron que muchos expertos predijeran un aumento considerable en el consumo de equipos eléctricos y electrónicos, así como un aumento en la 'basura electrónica' a medida que los usuarios compran para reemplazar equipos casi rotos.

Sin embargo, todas las principales categorías de equipos eléctricos y electrónicos -pantallas y monitores, equipos grandes, aparatos de intercambio de temperatura, equipos pequeños y lámparas- disminuyeron entre un 6% y un 8%.

“RESPIRO” EN DESECHOS ELECTRÓNICOS

Por peso, la mayor disminución en el consumo se produjo en la categoría de equipos grandes, con una disminución de 1,7 millones de toneladas, seguida de los equipos pequeños y las lámparas.

Los impactos fueron mayores en el primer y segundo trimestre de 2020. El consumo repuntó en el tercer trimestre en los países de ingresos altos, aunque no en los de ingresos bajos y medianos.

"La llamada brecha digital está aumentando", sentencia Ruediger Kuehr, de Unitar, quien añade: "La capacidad de adaptarse a la digitalización y ganarse la vida o simplemente de poseer y beneficiarse de la electrónica está disminuyendo en algunas partes del mundo. La Covid-19 también reveló una brecha digital en los países, donde muchos pobres se quedan atrás".

Un pequeño aspecto positivo es la reducción de los flujos de desechos electrónicos, aunque probablemente temporales en regiones donde la mala gestión de los desechos electrónicos provoca grandes daños ambientales y de salud. El informe insta a las naciones a utilizar este "respiro" para mejorar la gestión de los la 'basura electrónica'.

Por otro lado, Kees Balde, oficial superior de programas de la Universidad de las Naciones Unidas y coautor del informe, apunta que la Covid-19 ha acentuado la desigualdad global de otras maneras, al causar que 500 millones de personas estén subempleadas o sin trabajo, con una tasa femenina que duplica la masculina.

En este escenario, los trabajadores en los países pobres son los más perjudicados, al perder un 23% de sus horas de trabajo, lo que acarrea consecuencias sociales porque se endeudan, se saltan algunas comidas y mantienen a sus hijos en casa y lejos de la escuela.