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Maite Pagazaurtundua

Entrevista

2 Ene 2020

Maite Pagazaurtundua, eurodiputada en la delegación Ciudadanos Europeos, Grupo Renew Europe

“Ha costado mucho interiorizar una mirada adecuada sobre la discapacidad, pero tenemos ya el marco de interpretación”

Blanca Abella / Madrid

El trabajo y la lucha por los derechos humanos es algo que a Maite Pagazaurtundua le viene casi de serie, “desde pequeña me enseñaron que nadie es más que nadie, pero tampoco menos que nadie”. En esta tarea, también se ha encontrado batallando por los derechos de las personas con discapacidad y asegura que se siente muy afortunada al formar parte del Intergrupo de Discapacidad del Parlamento Europeo, que califica como uno de los más consolidados.

Es licenciada en Filología Hispánica y en Filología Vasca, ¿de qué manera su preparación académica ha favorecido su actividad política?

Las carreras humanísticas abordan los grandes problemas del ser humano ante la vida y la muerte, los retos como individuo y como pertenecientes a la comunidad. La cuestión del poder y de la libertad, especialmente de la libertad de conciencia. Creo que es una formación que ha fomentado en mí capacidad de análisis de problemas nuevos y cambiantes y también la creatividad y el sentido del compromiso humano.

Muestra una especial sensibilidad por la infancia y por las personas con discapacidad. Una sensibilidad y un trabajo constante. 

La dignidad de las personas es un derecho humano, la no discriminación lo es. En sentido general lo entendemos, pero en lo concreto nos falta mucho por aprender y entender cuando planificamos políticas públicas. 

¿Qué puede hacer hoy la Unión Europea por mejorar la vida de las personas con discapacidad?

Ha costado mucho interiorizar una mirada adecuada sobre la discapacidad. Pero tenemos ya el marco de interpretación. La UE y sus Estados miembros se han comprometido a trabajar por la igualdad de oportunidades. La referencia es la Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad (CDPD) de las Naciones Unidas. Este importante acuerdo entró en vigor para la UE en enero de 2011 y ha orientado el contenido de la Estrategia Europea sobre Discapacidad 2010-2020.

Podemos aplicar el potencial de las normas que se van aprobando. Podemos revisarlas, mejorarlas. Podemos influir en que las mejores prácticas de unos estados, los vayan copiando otros. Podemos ser transmisores de buenos debates y, sobre todo, de una actitud vital y política.

◾  Acta Europea de Accesibilidad (Directiva (UE) 2019/882 sobre los requisitos de accesibilidad de los productos y los servicios)
◾ Reglamentos sobre los derechos de los pasajeros con movilidad reducida en los principales modos de transporte
◾ Directiva (UE) 2016/2102 sobre la accesibilidad de los sitios web y aplicaciones para dispositivos móviles de los organismos del sector público
◾ Tarjeta Europea de Discapacidad (plan piloto)
◾ Tarjeta Europea de Estacionamiento
◾ Directiva 2000/78/CE relativa al establecimiento de un marco general para la igualdad de trato en el empleo y la ocupación
◾ El pilar europeo de derechos sociales no está muy desarrollado todavía, pero está recogido en él la cuestión de la discapacidad, lógicamente.

La UE presta apoyo financiero a través de una subvención anual a diversas organizaciones de personas con discapacidad y ONG de ámbito europeo (con cargo al programa Derechos, Igualdad y Ciudadanía) para facilitar su participación en los procesos de la UE. Así pueden aportar, por ejemplo, sus opiniones sobre el desarrollo de la legislación y las políticas de la UE. Los Fondos Estructurales y de Inversión Europeos (Fondos EIE) son los principales instrumentos financieros de la UE para reforzar la cohesión económica y social. Aquí hay todavía mucho por conseguir.

El compromiso de los eurodiputados españoles está ampliamente reconocido por los representantes de la discapacidad en España, ¿existe ese nivel de compromiso en el resto de eurodiputados, en los representantes de otros países?

El Intergrupo de Discapacidad del Parlamento Europeo es voluntario, nos agrupa, sin tener en cuenta ni la nación, ni el grupo político. Es uno de los grupos más consolidados del Parlamento y me siento muy afortunada de haber entrado a formar parte de él. 

¿Cómo valora el trabajo de esta sociedad civil, de un movimiento por la discapacidad como el Cermi que aúna luchas y reivindicaciones tan dispares y al mismo tiempo semejantes?

El Cermi es un ejemplo y sin la sociedad civil no habríamos llegado a la situación actual. Lo tengo muy claro.  

¿Cuentan el Parlamento europeo y la Comisión con esta parte de la sociedad civil para el estudio y el trabajo de las cuestiones que les afectan y la toma de decisiones?

No podría ser de otra forma. Por una parte porque la sociedad civil y las organizaciones como Cermi son muy activas y proactivas. Por otra parte porque no se pueden hacer las cosas sin conocer a los que mejor y de forma más especializada conocen los temas. Pero además la Comisión ha realizado una consulta a la ciudadanía y a las organizaciones para conocer su opinión sobre las actividades desarrolladas a escala de la UE desde 2010 para la aplicación de la Convención de las Naciones Unidas sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad. Esa energía es la que inspira el camino. Así será para evaluar lo que se ha avanzado entre 2010 y 2020 y servirá para que la Comisión se replantee la manera de mejorar su estrategia sobre discapacidad en el futuro, haciéndola más eficaz y centrada. 

El Parlamento Europeo firmó un acuerdo con el Grupo Social ONCE para mejorar la vida de 80 millones de europeos con discapacidad. El nuevo presidente del Parlamento Europeo, David Sassoli, renovó el pasado 27 de noviembre en Estrasburgo un acuerdo de colaboración con el presidente del Grupo Social ONCE, Miguel Carballeda, con el propósito de estrechar lazos e institucionalizar la labor que desde hace años viene desarrollando la entidad española en el ámbito político de las instituciones europeas, con el objetivo de mejorar la calidad de vida de los 80 millones de ciudadanos europeos con alguna discapacidad.

El convenio prevé fomentar la elaboración de materiales y publicaciones accesibles, impulsar conjuntamente la imagen de las personas con discapacidad en Europa, realizar acciones formativas, foros y seminarios de sensibilización o promover la estancia en el Parlamento de jóvenes ciegos en prácticas profesionales. La ONCE se sumará también con la emisión de 11 millones de cupones dedicados a Europa y al motivo del año europeo.

Usted aboga por una nueva Convención europea, ¿por qué resulta necesaria esta renovación?

Porque el mundo se ha transformado radicalmente y las reglas de juego de las instituciones deben adaptarse... para poder responder a los problemas reales que se plantean también de forma nueva. Por otra parte, como europeos podemos plantearnos cómo evolucionar en nuestros lazos. Nuestra relación como europeos está viva, y como en los lazos personales, hay que cuidarla, y mimarla, y es bueno repensarla.

¿Cómo podría favorecer esta nueva Convención las reclamaciones del sector de la discapacidad?

Si la apuesta es por estrechar nuestra ciudadanía, fortaleceremos la cohesión social, y por tanto podremos avanzar a estándares comunes más parecidos y mejor adaptados a las necesidades del sector. Espero que la sociedad civil pueda decir todo lo que tiene que expresar en la Conferencia. También espero que estemos muy atentos a que la dialéctica y el intercambio nos ayude mucho.
 

(Entrevista 'cermi.es' 372)