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Rieño

RSC+D

28 Feb 2020

En el marco del I Congreso Nacional de la Sociedad Civil, que se celebra en Madrid

Fernando Riaño destaca los “retos y oportunidades” de la sociedad civil ante el futuro y anima a “generar alianzas”

Servimedia / Madrid

El director de Responsabilidad Social Corporativa, Comunicación y Relaciones Institucionales del Grupo Ilunion y Fundación ONCE, Fernando Riaño, ha destacado los “retos y oportunidades” a los que se enfrenta la sociedad civil de cara al futuro y, en ese sentido, animó a “generar alianzas” para afrontarlos.

Así lo expresó durante su intervención el también presidente de Servimedia en la tercera sesión de trabajo del I Congreso Nacional de la Sociedad Civil que, bajo el lema '#RepensarEspaña', se celebra en el Casino de Madrid organizado por la Asociación Nacional Sociedad Civil Ahora, en el que destacó la “evolución en positivo” que, a su juicio, ha experimentado la “cultura de la filantropía” y el “papel que juega la sociedad civil”.

Como ejemplo citó la 'X solidaria' de las empresas que consideró un “paso más” que demuestra cómo la sociedad civil “ha influido” al mundo empresarial para que destine a fines sociales parte de sus beneficios “sin coste fiscal añadido”. “Si miramos hacia atrás, hay grandes hitos pero, si miramos hacia adelante, hay grandes retos”, remarcó.

Riaño también hizo hincapié en que la “aportación” de la ONCE a la sociedad suma más de 80 años promoviendo la “inclusión” de las personas con discapacidad y, al igual que aquella, en cierta medida, “llega donde la administración no ha llegado”.

En este punto, señaló que durante la época de la crisis la organización generó más de 50.000 empleos en España para personas con discapacidad y admitió que en estos más de ochenta años “se han dado grandes pasos desde la perspectiva de la sociedad en general y de la discapacidad, en particular”. “De cara al futuro, hay grandes retos y oportunidades como país y sociedad civil y, sobre todo, mirando a los mejores en este asunto”, abundó, al tiempo que defendió que no nos encontramos “en una época de cambios, sino en un gran cambio de época”.

Un contexto que, a su entender, se “resume” en el Objetivo de Desarrollo Sostenible número 17 de la Agenda 2030 que insta a generar alianzas, otra de las “necesidades” que, según Riaño, es “necesario repensar y reivindicar como sector y actividad con identidad propia” con el convencimiento de que la sostenibilidad, la RSC o la gobernanza “son la mejor forma de estar en el mundo y generar valor con otras organizaciones”.

“La posibilidad de buscar alianzas no genera inercias sino sinergias y hace que podamos tener más impacto y llegar más lejos y eso es algo a revisar y a tener en la agenda como organizaciones”, agregó, al tiempo que recordó que, con esa filosofía, España se convertirá este verano en “referente mundial de la inclusión” merced a la celebración de la asamblea general de la Unión Mundial de Ciegos.

Bajo el título ‘La fuerza de la sociedad civil’, en esta sesión también participó el director general de la Asociación Española de Fundaciones, Silverio Agea, quien aseveró que frente a los “problemas del país, la receta es más fuerza de la sociedad civil”. “A mayor fuerza de la sociedad civil, los problemas se minimizan e incluso pueden desaparecer”, añadió, consciente de que “no le damos la importancia que tiene que tener”.

En este sentido, afirmó que Cruz Roja y Cáritas son “líderes” a nivel internacional, al igual que la ONCE, sobre cuyo modelo recalcó que “en todo el mundo no hay nada similar”. También puso en valor su capacidad de “articular el movimiento de la discapacidad para conquistar derechos de estas personas” e instó a “sacar pecho de este tipo de entidades” que tienen la misma misión de “articular a la sociedad civil”.

FORTALECER LA SOCIEDAD CIVIL

Agea recordó que España cuenta con casi 9.000 fundaciones activas que tienen alrededor de 240.000 empleados y crean “riqueza” pero lamentó que hayan “olvidado la necesidad de articular y fortalecer a la sociedad civil”.

“Mi gran critica es que hemos sido muy buenos prestadores de servicios pero tenemos que recorrer ese camino de fortalecer a la sociedad civil porque esa es la receta que funciona para acabar con los problemas de España”, insistió, coincidiendo con Riaño en que, en ese sentido, la “palabra mágica es colaborar y articular alianzas” y en que resulta perentorio “desarrollar esa tercera función de las asociaciones”.

En el mismo sentido, el presidente de Cáritas, Manuel Bretón, mencionó la importancia de la Fundación Foessa, a la que se refirió como un espacio de análisis y reflexión “privilegiado” cuyo trabajo es “de vital importancia” para la organización, a la que “guía y ayuda a poner en práctica su propia esencia de visibilizar, acompañar y dar una radiografía de la sociedad”.

A este respecto, valoró como “una buena noticia” el hecho de que la entidad continúe creciendo en el número de voluntarios, cuya cifra ronda las 80.000 personas que se unen a los más de 5.000 contratados con más de 350 millones invertidos en proyectos sociales. A través de ellos ayuda a unos tres millones de personas como "reflejo de la fuerza de la sociedad civil de España”.

Para Bretón, el “gran reto” de la organización que preside es conseguir una sociedad “fortalecida que recupere la ilusión de hacer un mundo mejor”. “Tenemos que hacer algo para ilusionar a la sociedad y convencerla de lo importante que es su actuación”, sentenció.

Por su parte, el filántropo y presidente de la Fundación para las Relaciones Internacionales y el Diálogo Exterior, Diego Hidalgo, afirmó que la sociedad civil “es esencial” para el desarrollo de un país por su capacidad de “pensar a largo plazo”.

Asimismo, criticó que los “problemas” que España tenía en los años noventa son casi los mismos a los que tiene que hacer frente en la actualidad. Una circunstancia que achacó a que los gobiernos “no se han dedicado a proponer planes que mejoren la situación y creen ilusión por el proyecto España” por lo que, llamó a la sociedad divil a "actuar y unirse para complementar los esfuerzos de la sociedad política”.

Finalmente, el director del Casino de Madrid, Rafael Orbe, rememoró los orígenes de la institución recordando que surgió en 1836 a iniciativa de un “grupo de jóvenes descontentos con su situación que decidieron asociarse y crear un lugar de encuentro para compartir” e hizo valer el “impacto” que, según él, tienen en la actualidad organizaciones como ONCE y Cáritas.