En este análisis, publicado en 'Jama Pediatrics', que también cuenta con la participación del Hospital Clı́nico San Carlos de Madrid, el Hospital del Mar de Barcelona y la Universidad Complutense, se evaluó por primera vez la eficacia de intervenciones escolares contra el acoso, su impacto en la población y la asociación entre las diferentes variables y los resultados.

Los investigadores han concluido que estos programas son eficaces para reducir el acoso y para mejorar los problemas de salud mental de los escolares, y su eficacia no disminuye con el tiempo durante el periodo de seguimiento medio, que fue de más de 30 semanas.

Según indicó Celso Arango, director del Instituto de Psiquiatrı́a y Salud Mental del Hospital Gregorio Marañón y coordinador del estudio, "el acoso escolar es un importante factor de riesgo para los problemas de salud mental en la infancia, adolescencia y en adultos jóvenes, pero si bien estudios previos habían apoyado la eficacia de los programas antiacoso, su impacto en la población, es decir, el número de personas en las que hay que intervenir para evitare el acoso, aún no estaba claro".

David Fraguas, investigador del Cibersam, explicó que "también utilizamos el concepto impacto en la población, definido como el número de personas en las que hay que intervenir para evitar un caso de la variable estudiada, en este caso, acoso escolar y problemas de salud mental, para determinar las medidas a tomar para todos los estudiantes, independientemente de los que tengan mayor riesgo individual".