Éstas son algunas conclusiones del informe 'Las dos ruedas en España. Datos 2019', elaborado por 'Estamos Seguros' (iniciativa de la patronal aseguradora Unespa) en colaboración con Anesdor (Asociación Nacional de Empresas del Sector de Dos Ruedas) y el Centro Zaragoza, y dado a conocer este lunes.

El estudio indica que en 2019 (último año con datos disponibles) había 3.313.621 vehículos asegurados de dos ruedas en España, lo que supone un 2,7% respecto a 2018. Ese parque móvil se diferenciaba entre motos (1.921.344), escúteres (966.700, tras un incremento del 50% en la última década) y ciclomotores (425.577, un 42% desde 2010). La suma de motos y escúteres -esto es, vehículos de dos ruedas con más de 125 centímetros cúbicos- creció un 44% en el último decenio.

Barcelona lleva la delantera en materia de cultura motera en cifras absolutas, albergar 503.098 vehículos de dos ruedas debido a su peso demográfico total, la existencia de un gran núcleo urbano y la climatología mediterránea. Madrid va detrás, con 301.324 unidades. Otras provincias de mucho casco, caucho y manillar son Valencia (189.895) y Málaga (181.072).

El estudio acota aún más la distribución territorial teniendo en cuenta cuál es la tasa de motorización en función de la población residente. En este caso, Málaga es la tierra de las motos (5.979 por cada 100.000 habitantes), seguida de Granada (5.401) y Girona (5.220). Cádiz destaca en la tasa de motorización de ciclomotores (2.483 por cada 100.000 habitantes), por delante de Jaén (1.913) y Badajoz (1.815). Y Girona lidera la de escúteres (4.692), seguida de (3.577) y Guipúzcoa (3.532).

Las motos y los escúteres es palpable en prácticamente todas las provincias del arco mediterráneo, mientras que los adeptos del ciclomotor se encuentran en la mitad sur peninsular.

La suma total de vehículos de dos ruedas en función de la población residente indica que Girona, Málaga y Granada son las provincias con conductores más propensos a tener moto, escúter o ciclomotor, pues en cada uno de esos territorios hay uno de esos vehículos por cada 10 habitantes.

MUNICIPIOS MÁS MOTEROS

Por otro lado, el estudio también incluye un apartado municipal. Las localidades de más de 75.000 habitantes con mayor proporción de motos de gran cilindrada están en Las Rozas (527,7 de cubicaje medio), Valdemoro (513,4) y Rivas-Vaciamadrid (487,2). En la cuarta posición aparece la primera ciudad no madrileña, concretamente el municipio grancanario de Telde (467,7). Después, aparecen seguidamente otras siete localidades de la Comunidad de Madrid: Fuenlabrada (466,2), Parla (462,8), Alcorcón (460,3), Getafe (457,0), Pozuelo de Alarcón (456,4), Móstoles (456,2) y San Sebastián de los Reyes (448,1).

Según el informe, la explicación del predominio de municipios madrileños puede estar en que una moto de gran cilindrada permite circular por autovías hasta llegar a la capital y, al mismo tiempo, sortear los atascos propios de una gran ciudad.

El retrato robot del motero es un hombre que ronda los 46 años, tiene más de 10 años de experiencia en la carretera y no comparte su vehículo con nadie. Al contrario de lo que ocurre con los coches, los vehículos de dos ruedas rara vez se prestan, ni siquiera a familiares ni amigos, según el informe.

Las conductoras apenas representan un 12,74% de los propietarios de los vehículos de dos ruedas en la actualidad. No obstante, su presencia es cada vez más palpable entre los vehículos más ligeros, pues son el 21,74% de los propietarios de ciclomotores y un 19,50% de los escúteres. Por tanto, las mujeres se decantan por vehículos que se mueven con facilidad por la gran ciudad. La presencia femenina es modesta entre las motos (7,55%) debido, probablemente, al peso que pueden alcanzar estos vehículos.

La importancia del peso de la moto queda refrendada al comparar los cubicajes medios de los vehículos que manejan ellos y ellas. Un hombre suele conducir un escúter de 153 centímetros cúbicos y una mujer, de 113. Si van en moto, la diferencia es mayor ya que ellos manejan vehículos de 491 centímetros cúbicos, de media y ellas, de 269. En ciclomotores, en cambio, no hay diferencia: todos en 46.

El uso del escúter está claramente vinculado a la movilidad laboral. Lo delata el hecho de que un 43% tenga cubierta la retirada del carnet, un porcentaje muy superior al de las motos (19%) y ciclomotores (15%).