Según esta investigación, un 63% de las empresas consultadas constata que hay una mayor participación de sus empleados en los programas de voluntariado a raíz de la crisis derivada del coronavirus. Los resultados demuestran que, "si bien la crisis agudizó las necesidades de algunos colectivos, el voluntariado no se paralizó, sino que se transformó al entorno digital con el objetivo de mantener el apoyo hacia los más vulnerables e, incluso, impulsar nuevos tipos de acciones orientadas a cubrir las necesidades del momento".

El estudio asegura que más del 80% de las empresas en España han adaptado sus programas de voluntariado al entorno online por la emergencia sanitaria.

De hecho, el informe pone de manifiesto que el formato virtual es un modelo al alza: casi nueve de cada diez empresas (un 89%) considera que éste ganará relevancia en el voluntariado corporativo. En España, un 57% de las empresas estiman que la ejecución de sus programas a distancia seguirá en auge y se extenderá “algo más”, frente al 42% que confía en “un crecimiento considerable”.

El estudio también demuestra que más de un 70% de las compañías ha lanzado nuevos proyectos específicamente vinculados a la Covid-19 y que el 90% de ellos logró una buena acogida.

Es el caso, por ejemplo, de la Asociación de Voluntarios de “la Caixa”, que desde el 15 de marzo ha impulsado más de 400 actividades e implicado a 1.600 personas, colaborando con más de 200 entidades sociales. Estas acciones se volcaron en paliar la soledad de colectivos vulnerables, como personas mayores o pacientes de Covid-19. Las campañas 'Cartas contra la soledad' y 'Cadenas de vida' promovieron el intercambio de mensajes entre personas aisladas por el confinamiento y voluntarios. También se han desarrollado actividades formativas online, como talleres de educación financiera, o sesiones virtuales de acompañamiento en la lectura para los más pequeños.