- “La locura permitió a Alda Merini no solo relacionarse con su dolor, sino también con el dolor de los demás”
La otra verdad. Con este sugerente título, Mármara publica un texto de Alda Merini (Milán, 1931-2009) en el que la poeta habla de sus estancias en distintos manicomios. Diario de una diversa, lleva por subtítulo. Diversa porque la Merini no era loca, ni amante dispuesta, ni irónica, ni madre, ni religiosa, ni extravagante.