- Psicoanálisis y poesía, de sus vasos comunicantes
Freud decía que allí donde llegaba un psicoanalista, un psicólogo o un filósofo había estado antes un poeta. Basten estos versos de la argentina Andrea Aguirre para confirmar que la pregunta poética traspasa: “no desprecies nunca el caos/ de aquellos que dudan de ti;/ quizás sus quejas contengan/aquellas preguntas que siempre/ anduviste buscando”.
- “Cuando las posibilidades parecen extintas, entonces aparece el arte, la creación”
Latido izquierdo (Chamán ediciones) es un poemario que antorcha un duelo, que deambula ebrio por la línea en blanco del dolor ignífugo, que abre: la pérdida, el amor, la suspensión del orden del mundo (personal). Extenso, exuberante, pesadillesco.
- “En Colinas, la experiencia de vivir y la de escribir es un mismo proceso”
Antonio Colinas (La Bañeza, 1946) es un poeta centrífugo, se repliega, su discurrir es vehemente para soterrado, más próximo a un Valente que a un Darío, por ejemplo. En 1982 el Premio Nacional de Literatura vino a refrendar una obra que tiene que ver con Leopardi, también con Quasimodo, pero él. Colinas.
- “La poesía viola la causa y efecto”
Lo de Leopoldo ‘Teuco’ Castilla (Salta, Argentina, 1947) es de una hermosura honda que conmueve constelaciones. Su delicadísima mirada ahonda en el misterio de un modo que coloca al lector a pie de abismo al tiempo que lo abraza.
- "A veces hay que dejar de mirar atrás para seguir avanzando"
Penumbra. Frontera. Linde. Orilla. Espacio transitorio (Huerga&Fierro), de José Luis Zerón (Orihuela, 1965) es un poemario que transita ese territorio que no es una cosa ni su contraria, porque acaso esté siendo todo a la vez y, por tanto, habitarlo sólo puede hacerse transitoriamente. El dolor. La cicatriz. Lo extraviado. La pérdida.
- “Quién mejor que el poeta observa su entorno desde la emoción, el sentimiento y la solidaridad”
La poesía como azada con la que labrar una tierra que alimente a todos, como horquilla con la que repartir el trigo, como aperos con los que denunciar las injusticias y dar voz a los que tienen la garganta atravesada por el dolor. Así la entiende Asunción Caballero, Mascab.
- Negroni y Dickinson o la lucha del goce y el dolor
Digámoslo pronto: Archivo Dickinson (Vaso roto) celebra la hondura del alma.
- “Tanto la poesía como los sueños reflejan una realidad paralela, liberada de complejos y ataduras, llena de misterios y símbolos”
Travesía (Chamán ediciones).
- “No creo en la belleza de la muerte”
Descendimiento (Pre-Textos) es un poemario hilvanado a partir del cuadro del primitivo flamenco van der Weyden. En él, la poeta Ada Salas (Cáceres, 1965) abre grietas. La del silencio. La de la palabra de las formas. La del misterio. La de la muerte. La del sufrimiento. La de la belleza. La de la contemplación de los nueve personajes en torno a un Cristo ya inanimado.
- “Para Alda Merini, la locura es un estado del alma”
‘Delito de vida’.