En concreto, según la estadística de la Agencia Tributaria, los declarantes con alguna situación familiar de discapacidad tuvieron un rendimiento neto del trabajo (salario o pensión) de 18.102 euros anuales, frente a los 22.272 euros de media del total de declarantes sin ninguna situación de discapacidad y a los 21.800 euros de media del total de declarantes.
Por otro lado, los declarantes con alguna situación familiar de discapacidad tuvieron unos ingresos netos de 1.234 euros de media por rendimiento del capital mobiliario, 579 euros menos que los 1.813 de media de todas las declaraciones de IRPF y 510 euros menos respecto a los 1.581 euros de media de los declarantes sin situaciones de discapacidad.

DATOS DEMOGRÁFICOS

La Agencia Tributaria recibió en la campaña de la Renta 2019 un total de 2.352.771 declaraciones con alguna situación familiar de discapacidad, ya fuera el propio titular de la declaración, el cónyuge o algún descendiente o ascendiente. Esta cifra representa el 11,019% de todas las declaraciones presentadas en 2019, por encima del 11,07% que representaron el año anterior, cuando alcanzaron las 2.281.429 declaraciones de este tipo.

El número total de personas con discapacidad contabilizadas en las declaraciones de 2019 fue de 2.340.486, un 1,7% más respecto al año anterior (2.301.286). De las 2.352.771 declaraciones, en 1.966.023 la persona con discapacidad era el titular de la declaración, mientras que 374.463 declaraciones eran de declarantes con personas con discapacidad a su cargo.

EDAD Y GÉNERO

Por género, entre las 2.340.486 personas con discapacidad recogidas en las declaraciones, 1.241.062 (53,02%) eran varones, mientras que 1.099.424 (46,97%) eran mujeres. En todos los tramos de edad los varones superaron al número de mujeres con discapacidad, salvo en el caso de los mayores de 65 años.

En cuanto a la edad, los mayores de 65 años suponen el tramo con más personas con discapacidad, con 968.217, de los cuales 494.043 eran mujeres y 474.174 varones. En concreto, los mayores de 65 años suponían el 41,3% de las personas con discapacidad reconocidas en las declaraciones de IRPF, mientras que los mayores de 56 años acumulan el 63,57%.