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Inmigración

Inmigración

18 Ene 2023

288 eran mujeres y 101, menores de edad

Casi 2.400 personas murieron en el intento de llegar a España desde África en 2022

Servimedia / Madrid

Un total de 2.390 personas murieron en trayectos migratorios para entrar en España desde las costas noroccidentales de África, según señala el colectivo Ca-Minando Fronteras en su informe ‘Monitoreo del derecho a la vida 2022’. De estas, 288 eran mujeres y 101, menores de edad. Elaborada por el Observatorio de Derechos Humanos del colectivo, esta investigación destaca también que más del 91% de los cuerpos nunca se encuentran.

Las muertes confirmadas en 2022, "ligeramente superiores a las de 2020", concuerdan con la tendencia de aumento de los fallecimientos en los últimos cinco años en todas las rutas --marítimas y terrestres-- de acceso a Europa por el Estado español, apuntó Ca-Minando Fronteras.

Un año más, la ruta hacia las Islas Canarias destaca como "la más mortífera", con 1.784 víctimas. Por otro lado, el trabajo resalta "la invisibilización sistemática de la ruta argelina" (entre las costas del norte de Argelia y el levante español y Baleares), donde al menos 464 personas perideron la vida en 2022, según la ONG.

"La demora en la notificación de embarcaciones desaparecidas, la distancia y peligrosidad de la propia ruta y la omisión de rescates colocan a los migrantes procedentes de Argelia y a sus familias en una situación de especial vulnerabilidad", indicó .

Asimismo, el trabajo resalta que la mayoría de las personas víctimas de las rutas migratorias fallecen sin que sus cuerpos sean jamás encontrados (el 91,42%). Ello tiene "un impacto terrible para sus familias y en sus comunidades de origen", por la imposibilidad de hacer un duelo completo y por las implicaciones legales y psicológicas, explicó la ONG.

TRAGEDIA DE MELILLA

El informe analiza una lista de consecuencias de las políticas migratorias españolas que "dificultan, obstaculizan o directamente impiden poner en marcha mecanismos de rescate para salvar las vidas de los migrantes". Pone como ejemplo “el caso flagrante de violación transnacional de derechos en la frontera terrestre entre Melilla y Nador, donde el 24 de junio perdieron la vida 40 personas en un suceso" que implicó "la utilización de medios terribles de disuasión por parte de las fuerzas policiales españolas y marroquís", entre ellos, balas de fuego, afimrma. Siete meses después, la Fiscalía española archivó la investigación de la tragedia y comunicó que ni en la actuación de los agentes ni en las devoluciones en caliente se aprecian indicios de delito. El informe denuncia "la impunidad del caso, así como la violación sistemática de derechos humanos a uno y otro lado de la frontera".