En su despedida, Astrid agradeció todo lo que el snowboard ha aportado a su vida, sobre todo a su entorno más cercano (familia y equipo técnico, con Albert Mallol al frente) y a instituciones como la Federación Española de Deportes de Personas con Discapacidad Física (Feddf), el CPE, el Consejo Superior de Deportes (CSD) y los patrocinadores del Plan ADOP.

Fina consiguió en Pyeongchang 2018 la primera medalla paralímpica española en snowboard. Fue bronce en la prueba de cross en esa cita surcoreana, donde también logró un diploma paralímpico con un sexto puesto en 'banked slalom'. Era su segunda experiencia paralímpica, ya que cuatro años antes también logró un sexto puesto en el snowboard cross de Sochi 2014.

Nacida en Barcelona en 1983, Astrid Fina se inició en el snowboard en 2011, dos años después de perder el pie derecho por un accidente de moto. Un año más tarde entró en el equipo nacional y en 2014 debutó en los Juegos Paralímpicos de Sochi. Desde entonces, la 'rider' catalana progresó y en el Mundial de 2016 rozó el podio con un cuarto puesto en 'banked slalom' y un quinto en cross.

Tras varias medallas en pruebas de la Copa del Mundo, en marzo de 2019 consiguió su último gran éxito internacional: el bronce en 'banked slalom' del Campeonato del Mundo de Snowboard Paralímpico, disputado en Finlandia.

El CPE agradeció a Fina su "esfuerzo y dedicación durante estos años de logros deportivos", pero también por "haberse convertido en una de las más destacadas representantes del deporte paralímpico ante la ciudadanía española, haber trasladado magníficamente los mensajes y valores del deporte que crean una imagen positiva de las personas discapacidad y haber servido de inspiración para toda la sociedad". "

"El CPE se pone a su disposición para ayudarla en lo que sea posible en esta nueva etapa de transición en su vida tras la retirada de la alta competición", concluyó el Comité Paralímpico Español.