Según los datos difundidos por el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, el déficit de 2.903 millones equivale al 0,24% del PIB y es el resultado de unos derechos reconocidos o ingresos de 100.799,69 millones, que se incrementaron un 3,07% frente al año pasado, y unas obligaciones reconocidas o gastos de 103.702,9 millones (+0,72%).

En términos de caja, la recaudación líquida del sistema alcanzó los 95.818,88 millones de euros, con un incremento del 0,93% respecto al ejercicio anterior. Por su parte, los pagos presentan un aumento del 0,68%, hasta alcanzar los 103.568,59 millones.

INGRESOS

Las cotizaciones sociales crecieron un 7,77%, hasta los 74.384,61 millones. Los ingresos por las cuotas de ocupados aumentaron un 9,25% (5.850,42 millones de euros más), mientras las cotizaciones de desempleados bajaron un 8,39% (485,69 millones de euros menos).

No obstante, la evolución de los ingresos por cotizaciones de ocupados “se encuentra aún afectada por las medidas de protección a empresas y trabajadores” por la pandemia como las exoneraciones concedidas a los trabajadores de empresas en Expedientes de Regulación Temporal de Empleo (ERTE), que supusieron ingresar 1.204,16 millones menos, así como las exoneraciones de cuotas a autónomos perceptores de las prestaciones extraordinarias, según explicó el ministerio.

Las transferencias corrientes ascendieron a 25.846,01 millones, con un descenso del 7,74%. La partida más significativa correspondió a las transferencias del Estado y Organismos Autónomos, que sumó 23.312,25 millones (un 9,89% menos por la transferencia del Estado para cubrir el impacto por las medidas Covid).

GASTOS

Las prestaciones económicas a familias e instituciones alcanzaron 96.933,53 millones, un 3,38% más que en el mismo periodo de 2020. Esta cifra representa un 93,53% del gasto total realizado en el sistema de Seguridad Social. La mayor partida, 89.304,64 millones, correspondió a pensiones y prestaciones contributivas, con un aumento de un 2,64% (2.294,85 millones más).

En un análisis detallado, el gasto en pensiones (incapacidad permanente, jubilación, viudedad, orfandad y en favor de familiares) se elevó un 3,25%, hasta los 77.520,9 millones, debido al incremento del número de pensionistas (del 1,04%), al aumento de la pensión media (2,18%), así como a la revalorización de las pensiones contributivas en el ejercicio 2021 (0,9%).

Respecto a los subsidios de incapacidad temporal, el gasto total repuntó un 14,82% y totalizó 7.209,22 millones.

Los importes más significativos fueron los derivados de las contingencias comunes (5.381,17 millones de euros), y de los procesos derivados del Covid-19, que alcanza un importe acumulado de 1.147,97 millones.

El gasto en prestaciones por nacimiento y cuidado de menor, corresponsabilidad en el cuidado del lactante, riesgo durante el embarazo y durante la lactancia natural y cuidado de menores afectados por cáncer u otra enfermedad se elevaron un 13,24%, por la ampliación del permiso del segundo progenitor, anteriormente denominado permiso de paternidad, de 12 a 16 semanas.

El gasto acumulado de las prestaciones para autónomos hasta 31 de julio ascendió a 2.295,10 millones.

Las pensiones y prestaciones no contributivas, incluidos los complementos por mínimos, contabilizaron 7.688,89 millones (+12,89%).

Por su parte, los gastos de gestión realizados por la Seguridad Social experimentaron un incremento del 5,51%, hasta los 2.203,92 millones de euros.