¿En qué se parece una comunidad de vecinos al mundo?

Una comunidad de vecinos es como un micromundo donde pueden estar representados los distintos roles que nos encontramos de puertas para afuera. Diferentes personalidades habitando en un mismo núcleo, al igual que puede ocurrir en un pueblo, en una ciudad o en tu lugar de trabajo. 

De entre las diferentes tipologías humanas que habitan una comunidad, ¿cuál de ellas es la que más le fascina?

El vecino o la vecina chismoso/a. Me fascina porque si lo veo desde fuera me resulta atractivo y gracioso, como es el ejemplo de Amparo o Gregoria en Se atormenta una vecina. Otra cosa es convivir con un vecino así. Ahí ya lo vives (y lo sufres) en primera persona, y la cosa cambia, ya me provoca más repulsión. De ahí mi fascinación, cómo un tipo de persona puede provocarme sentimientos tan dispares. 

¿Cómo se detecta la verdad?

Dicen que las mentiras tienen las patas muy cortas. No tengo la clave para esta pregunta pero creo que hay algo muy importante: la observación. Al final, siempre hay un error, una pequeña metedura de pata que hace salir a la mentira de su escondite. Solo el que mantiene un rol de observador podrá detectarla. 

¿De qué modo convivir con el misterio –pienso en Cobos- sin que no nos mate?

Complicado. Y si no nos mata, nos termina afectando de algún modo u otro. Pero claro, qué sería de la vida sin misterio, sino que se lo pregunten al gran Iker Jiménez. 
Lo mejor para convivir con el misterio sin que no nos mate es aceptarlo, no hay más. Siempre va a haber algo a nuestro alrededor que nos inquiete, nos atormente o nos perturbe. Aceptarlo es clave para llevarlo de la mejor forma posible. 

¿En qué casos conviene tener un carácter vehemente, como Cobos, y cuándo ser apocado, como Ortega?

Como dirían nuestras madres, hay que saber comportarse en cada momento y saber cuándo hay que actuar como Cobos y cuando como Ortega. Lo ideal sería tener un poco de cada uno y saber adoptar un carácter u otro según la circunstancia: el ímpetu de Cobos es fundamental para afrontar con fuerza los golpes que se te presentan en la vida; la discreción de Ortega es importante para cuando uno no quiere llamar demasiado la atención, porque no siempre hay que estar en primera línea de batalla.  
Yo creo que Cobos y Ortega conforman la mezcla perfecta de lo que tiene que ser un buen policía. Por eso hacen tan buen equipo. 

De entre los hilarantes y ambivalentes vecinos, ¿con cuál de ellos pasaría una cuarentena?

Contestaría que con Ortega, pero no sé si va incluido en la categoría de “vecino”. Así que… si tuviera que pasar la cuarentena con alguien sería con Lucas y Paula, porque creo que son los más tranquilitos y en una cuarentena no querría tener al lado los fuertes caracteres de Amparo o Andrés. Eso sí, la puerta del fondo del pasillo que permanezca cerrada, por favor. 

¿Por qué esa enorme disposición en el ser humano a mentir?

Por miedo. El miedo es, en muchas ocasiones, el motor de los seres humanos a actuar de una forma u otra. Los personajes de Se atormenta una vecina mienten por miedo a, para no revelar sus cajones oscuros. Porque, muchas veces, decir la verdad implica revelar algún secreto que no quieres que nadie sepa. 

En caso de sospecha, ¿conviene aplicar la navaja de Ockham?

No siempre. A veces la explicación más sencilla no siempre es la correcta. 

¿Existe el crimen perfecto?

Me gustaría decirte que no, que siempre se acaba cazando al malo. Pero, lamentablemente, no es así. 

¿Hay algún tema que no pueda ser contado desde el humor?

Yo creo que hay muy pocos temas que no se puedan contar desde el humor, obviamente los que tengan un carácter sensible y pueda resultar ofensivo, es preferible que se trate con la seriedad que merece. Pero, siempre que se pueda tirar de humor, mejor. Así se hace más llevadera la dura realidad.