Así se recoge en la última ‘Cuenta de bienes y servicios ambientales’ dada a conocer este viernes por el Instituto Nacional de Estadística (INE), con datos provisionales de 2019 que se revisarán cuando se difundan los de 2021.

Los dominios ambientales en los que se generó más empleo durante el año pasado fueron gestión de residuos (36,3%) y otros ámbitos de protección ambiental (13,7%). La gestión de residuos fue la que más aportó a la tasa de crecimiento del empleo (0,962 puntos), por delante de protección y descontaminación de suelos, aguas subterráneas y aguas superficiales (0,627).

Las actividades económicas con mayor empleo ambiental fueron suministro de agua, actividades de saneamiento, gestión de residuos y descontaminación (39,3% del total) y servicios (24,2%).

Suministro de agua, actividades de saneamiento, gestión de residuos y descontaminación se convirtió en la actividad que más aportó a la tasa de crecimiento del empleo (0,940 puntos), en tanto que suministro de energía eléctrica, gas, vapor y aire acondicionado registró el mayor aumento anual (13,5%).

VALOR AÑADIDO BRUTO Y PIB

Por otro lado, el Valor Añadido Bruto (VAB) asociado a la producción de bienes y servicios ambientales se situó el año pasado en 26.224,7 millones de euros, lo que representa un descenso del 1,8% respecto al de 2018. La economía ambiental representó un 2,11% del Producto Interior Bruto (PIB) y se incrementó un 3,4% durante el año pasado.

Las actividades con un mayor peso en el VAB ambiental fueron producción de energía a través de fuentes renovables (35,7% del total) y gestión de residuos (23,0%).

El dominio con un mayor peso sobre el total del VAB ambiental generado correspondió el año pasado a producción de energía a través de fuentes renovables (35,7% del total), seguido de gestión de residuos (23,0%).

El ámbito de ahorro y gestión de energía y/o calor fue el que más aportó a la tasa de variación (0,774 puntos), mientras que producción de energía a través de fuentes renovables tuvo la aportación más negativa (-1,846 puntos).

Las actividades con un mayor peso en el VAB ambiental en 2019 fueron suministro de energía eléctrica, gas, vapor y aire acondicionado (37,0% del total), y suministro de agua, actividades de saneamiento, gestión de residuos y descontaminación (27,9%).

El sector de la construcción fue el que más positivamente contribuyó a la tasa de crecimiento respecto al año anterior (0,225 puntos), mientras que suministro de energía eléctrica, gas, vapor y aire acondicionado fue el que tuvo la aportación más negativa (–1,142 puntos).

EXPORTACIONES

Por otro lado, las exportaciones ambientales ascendieron el año pasado a 6.539,2 millones de euros, lo que supuso una disminución del 1,6% respecto al anterior.

Los ámbitos que tuvieron mayor peso en las exportaciones fueron producción de energía a través de fuentes renovables (un 24,8 del total) y ahorro y gestión de energía y/o calor (19,5%). Estas exportaciones incluyen los productos energéticos (biocombustibles) y bienes de equipo vinculados a la producción de energía eléctrica renovable (grupos electrógenos de energía eólica) y a un menor consumo de energía (electrodomésticos de la máxima certificación energética, principalmente).