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Luis Cayo Pérez Bueno

Estereotipos

4 Oct 2021

Lo que incita a considera que sus vidas son de menos valor frente a personas “saludables”.

El Cermi denuncia el estigma que aún pesa sobre la percepción social de las personas con discapacidad

Redacción / Madrid

El Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad (Cermi) ha denunciado el estigma que aún pesa contra las personas con discapacidad “y que quiebra una percepción social ajustada y apreciativa de este grupo de población, dificultando gravemente su participación e inclusión”.

Así se expresa el presidente del CermiI, Luis Cayo Pérez Bueno, en una entrevista publicada en el portal de la Cátedra de la Universidad Complutense de Madrid contra el Estigma, en la que se resumen las aportaciones que el representante asociativo realizó en el curso de verano de El Escorial dedicado a esta cuestión, celebrado el pasado mes de julio.

Tras definir el concepto de estigma y enumerar los elementos que lo integran, Pérez Bueno pone ejemplos recientes de cómo el estigma sigue vigente y opera contra las personas con discapacidad, negando o devaluando sus derechos más básicos. Por ejemplo, la negación de la admisión de pacientes con discapacidad en unidades de cuidados intensivos durante los momentos más críticos de la pandemia ocasionada por el coronavirus, ya que el estigma imperante considera que sus vidas son de menos valor frente a personas “saludables”.

En la estela del estigma, el presidente del Cermi sitúa también la reciente aprobación en España de la Ley de Eutanasia, ya que expone que en ella actúa el estigma de que las personas con discapacidad, “entes sufrientes, desean la muerte para aliviar sus dolencias y sus vidas demediadas, por eso son enumeradas como grupos sociales especialmente aptos o deseosos para recibir la eutanasia”.

Ante cómo actuar para disipar el estigma, el representante asociativo pide a los profesionales que, sin paternalismos ni suficiencias, se conviertan en facilitadores, en el dispositivo de apoyo y acompañamiento activo de las personas que sufren estigma, para prestar ayuda en el combate del mismo. Son, apunta Pérez Bueno, el aliado más firme y eficaz, pero sin sustituir, sin hablar por o en su nombre.

Y sobre cómo han de conducirse las personas que sufren estigma, para el presidente del Cermi ellas deben ser el motor de cambio. “No hay que esperar y ver, sino actuar, ser la avanzadilla; tomar conciencia, no resignarse y rebelarse ante ese estado de cosas, inadmisible”.