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Siniestro vial

Seguridad vial

1 Jul 2022

Y causan heridas de diversa consideración a otros 50 millones

La "epidemia silenciosa" de los siniestros viales mata a 1,3 millones de personas al año

Redacción / Madrid

Los siniestros de tráfico matan al año a cerca de 1,3 millones de personas y causan heridas de gravedad a otros 50 millones en todo el mundo, lo que supone "una epidemia silenciosa y ambulante" que combatir. El secretario general de la ONU, António Guterres, hizo estas consideraciones este jueves en la reunión de alto nivel convocada por la Asamblea General de las Naciones Unidas para mejorar la seguridad vial.

"Los accidentes en las carreteras son una epidemia silenciosa y ambulante", afirmó Guterres ante los representantes de los 193 Estados miembro de la ONU, que debaten este jueves el camino a seguir con la meta de reducir a la mitad el número de víctimas mortales y personas lesionadas para 2030, un compromiso que plasmarán al final de la reunión de alto nivel en una declaración política.

Con esa declaración, "los Gobiernos de todo el mundo se comprometen a proporcionar liderazgo y coordinación al más alto nivel de gobierno para garantizar que todas las partes de la sociedad estén incluidas para actuar en materia de seguridad vial y comprometerse a impulsar políticas y acciones para reducir las muertes y lesiones", según la Organización Mundial de la Salud (OMS), la agencia de la ONU competente en materia de seguridad vial.

Según la OMS, la declaración también exige el desarrollo y la financiación de planes nacionales y locales con objetivos y recursos claros.

Guterres recordó que el 90% de los siniestros de tráfico ocurren en los países de renta baja y media, y que son la primera causa de muerte entre los niños y jóvenes de cinco a 29 años. "Se trata de una tragedia más que inaceptable, puesto que muchas de estas muertes se pueden evitar”, apuntó.

De acuerdo con datos de la OMS, desde la invención del automóvil han muerto por accidentes viales más de 50 millones de personas en el mundo, un número superior a las víctimas mortales de la Primera Guerra Mundial o de algunas de las peores epidemias.

OBJETIVOS “CLAROS”

Guterres explicó que esas muertes tienen mucho que ver con una infraestructura pobre y falta de planificación urbana, al igual que con sistemas laxos de salud y protección social, falta de educación vial y desigualdades persistentes tanto entre los países como dentro de ellos.

Asimismo, advirtió de que las carreteras inseguras constituyen un gran obstáculo para el avance de las naciones en desarrollo, puesto que les generan pérdidas anuales de entre un 2% y un 5% de su PIB. Además, señaló que familias enteras pueden caer en la pobreza debido a la pérdida del principal sostén económico o a los gastos médicos prolongados y la pérdida de ingresos.

"Nuestros objetivos son claros: reducir a la mitad las muertes y lesiones por accidentes de tránsito para 2030 y promover la movilidad sostenible con la seguridad en el centro", recalcó, antes de añadir: "Necesitamos medidas más ambiciosas y urgentes para reducir los mayores riesgos, como el exceso de velocidad; conducir bajo los efectos del alcohol o de cualquier sustancia psicoactiva o droga; la falta de uso de cinturones de seguridad, cascos y sistemas de retención infantil; infraestructura vial insegura y vehículos inseguros; poca seguridad para los peatones, y aplicación inadecuada de las leyes de tráfico".

Para ello, según Guterres, hace falta una mayor financiación para infraestructuras sostenibles y seguras, e inversiones en una movilidad más limpia y una planificación urbana más ecológica, especialmente en los países de ingresos bajos y medianos. "Tenemos que adoptar un enfoque más holístico de la seguridad vial. Esto significa una mejor integración de la seguridad vial en las políticas nacionales, desde la educación, la salud y el transporte hasta la mitigación climática, la planificación del uso de la tierra y la respuesta ante desastres", concluyó.