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Batet

Política social

2 Abr 2019

Según la ministra de Política Territorial y Función Pública, Meritxell Batet

“La igualdad de las personas con discapacidad no es una opción política, es un mandato constitucional”

Servimedia / Madrid

La ministra de Política Territorial y Función Pública, Meritxell Batet, remarcó este lunes que la igualdad de las personas con discapacidad “no es una opción política, sino que es un mandato constitucional”, por lo que recordó que “todos nos debemos ver obligados a cumplir con ella”.

Así lo indicó durante su intervención en el Desayuno por Talento ‘La inclusión social en las políticas municipales’, organizado por Inserta Empleo, la entidad de Fundación ONCE para la inclusión laboral y la formación de personas con discapacidad, donde comentó que el derecho a disfrutar de la ciudad a través de la accesibilidad “es un postulado universal”.

La ministra destacó que durante los últimos 50 años se ha avanzado mucho, a través de medidas para facilitar la vida diaria de las personas con discapacidad, “gracias al impulso de la ONCE y de la sociedad civil, que se han organizado y han puesto estos temas encima de la mesa para lograr una sociedad más tolerante con las necesidades de los ciudadanos”.

Batet comentó que las administraciones públicas “estamos al servicio de esas necesidades de las mayorías de ciudadanos, en especial los vulnerables y de quien hay que proteger sus derechos para superar sus discriminaciones”.

En este sentido, añadió que “hay que poner de manifiesto esta discriminación y establecer un marco normativo para luchar contra ella, además de velar por las normas en todos estos ámbitos, actuando ejemplarmente en el ámbito de la función pública para demostrar la igualdad”.

Batet reiteró que dicho trabajo “es exigible” a toda Administración, porque “la igualdad no es una opción política”, sino que “es un mandato constitucional” y “todos nos debemos ver obligados a cumplir con ella”.

Sobre este tema, la ministra incidió también en que es obligación de las administraciones hacer accesible el turismo y reconocer el derecho al ocio de las personas con discapacidad.

La responsable de Política Territorial y Función Pública remarcó que las situaciones de vulnerabilidad “no van solas”, porque las personas con discapacidad “sufren otras discriminaciones”, como, por ejemplo, el hecho de tener una discapacidad y ser mujer.

En estos casos, continuó, la discriminación “se acentúa en el ámbito de la violencia de género”, por lo que dijo que “hay que seguir avanzando y no dejando a nadie atrás, promoviendo la igualdad y los avances”.

Por ello, señaló que los poderes públicos “debemos perseguir la igualdad efectiva”, porque hay muchas políticas que “rompen el consenso fundamental”. “Ningún gobierno puede desentenderse de la vulnerabilidad que afecta a los ciudadanos”, concluyó Batet.

Este desayuno se enmarca en los programas operativos de Empleo Juvenil (POEJ) y de Inclusión Social y de la Economía Social (Poises), que está desarrollando Fundación ONCE a través de Inserta, con la cofinanciación del Fondo Social Europeo, con el objetivo de incrementar la formación y el empleo de las personas con discapacidad.